No sentirás dolor durante el procedimiento, se te aplicará anestesia en gotas para disminuir las molestias por el lente que utilizará el especialista. El procedimiento suele realizar con previa dilatación de las pupilas, por lo que podrás sentir molestias por la sensibilidad a la luz antes, durante y hasta algunas horas después del procedimiento. Es normal que veas algunas partículas flotantes y tengas visión borrosa hasta horas después del procedimiento, dependiendo del motivo por el cual se realiza la fotocoagulación láser.

La fotocoagulación láser permite controlar o retrasar el daño en la retina en algunas situaciones empleando un láser que permite sellar los vasos sanguíneos para evitar su crecimiento, crear cicatrices en los desgarros para prevenir el desprendimiento de la retina o destruir algunas otras estructuras anómalas. 

*Fuente: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/007664.htm